Consejos
Abuso del secador o la planchita, exposición a factores externos agresivos, coloraciones...son solo algunas de las causas que pueden generar daño en el cabello y, por ende, puntas abiertas.
¿Cómo reconocer cuando esto sucede? Podemos prestar atención a estas señales: pelo que se enreda con mucha facilidad, puntas que lucen descoloridas, desaparición del brillo y, en cambio, aparición de unos puntitos blancos sobre las puntas.
Primero lo primero: adaptar tu rutina de cuidados a tus necesidades. Para despedirte del pelo quebradizo, y las puntas abiertas, y comenzar a reconstruir tu cabellera desde el interior, te recomendamos que empieces por lavar tu cabello con un shampoo especial para cabellos dañados. Seguí con el acondicionador para desenredar y reducir los quiebres causados por el cepillado.
Al menos por un tiempo, mantenete lejos de secadores y planchitas.
En el cepillado también está la clave. Procurá hacerlo suavemente todos los días, antes de irte a dormir. También es importante utilizar gomitas y hebillas que no corten ni dañen aún más tu pelo y evitar a toda costa los peinados agresivos, como las colitas bien tirantes.
¿Puntas abiertas? ¡Nunca más!
Fuente: Loreal Paris